Acaba de comenzar el año y sin embargo son muchos los padres que ya tienen la mente en un verano que, aunque parezca lejano, no tardará mucho en llegar.

Y es que, aunque gran parte de la población tengan la mente puesta en sus próximas vacaciones, lo cierto es que aquellos que son padres tienen la mente más puesta en las vacaciones de sus hijos que en las suyas propias. Es hora de ir pensando en qué hacer con los niños durante sus vacaciones. Algunos lo tienen claro y repiten la misma fórmula de años anteriores: echar mano de familiares y amigos, optar por campamentos urbanos, pedir una excedencia para hacerse cargo de ellos; lo cierto es que existen opciones para todos los gustos y, pese a ello cada vez son más los padres que optan por una Casa de colonias en Tarragona, o en cualquier otra ciudad en la que se resida.

Pero, ¿qué es lo lleva a los padres a decantarse por una casa de colonias antes que por cualquier otra opción?

Los padres que se decantan por esta opción lo hacen porque desean alejar, al menos durante un breve tiempo, a sus hijos de la vida sedentaria y tecnológica a la que la mayoría están acostumbrados, quieren que disfruten de la naturaleza, realicen actividades físicas y educativas que sean a la par divertidas, de tal forma que aprovechen su estancia en la casa de colonias para aprender cosas nuevas, así como para mejorar y explorar sus capacidades y ampliar su grupo de amistades.

No obstante, cabe comentar que una Casa de colonias en Tarragona, así como en cualquier otra ciudad, ofrece servicios a familias, grupos y escuelas que van mucho más allá del verano. Y es que, este tipo de casas es frecuentemente utilizado por escuelas para la organización de actividades que combinen educación, naturaleza y diversión a partes iguales, haciendo del aprendizaje fuera de las aulas una actividad que merezca la pena tanto para educadores como para niños. Igual de frecuente es encontrar durante el curso a familias o grupos de amigos que acuden a las casas de colonias sin más fin que divertirse y disfrutar de la compañía de los suyos sin límites. Lo cierto es que las casas de colonias han sabido adaptarse a los nuevos tiempos y, hoy es posible incluso utilizarlas para la celebración de eventos.

 Es probable que muchos niños pataleen ante la decisión que sus padres han tomado, pero lo cierto es que aquellos que ya han asistido alguna vez a una de estas casas, cuentan los días para que llegue el momento de volver.